El Mercury Prize 2025, uno de los galardones más prestigiosos de la música británica e irlandesa, acaba de revelar su lista de nominados, y este año promete ser uno de los más comentados en su historia. Con veteranos que regresan tras décadas, jóvenes talentos que debutan con fuerza y una notable variedad de géneros, la ceremonia del 16 de octubre en Newcastle marcará un hito: será la primera vez que el premio abandone Londres para expandirse hacia el norte de Inglaterra, acompañado de actividades culturales bajo el sello Mercury Fringe.
Los 12 nominados al Álbum del Año
La selección de este año pone de manifiesto la amplitud creativa de la música en Reino Unido e Irlanda:
- Pulp – More: el regreso de la icónica banda britpop después de más de 20 años.
- Wolf Alice – The Clearing: cuarta nominación consecutiva, consolidando su lugar como referente del indie rock contemporáneo.
- CMAT – Euro-Country: la irlandesa vuelve con su pop alternativo cargado de ironía y autenticidad.
- FKA twigs – Eusexua: siempre vanguardista, combina electrónica, R&B y experimentación visual.
- Fontaines D.C. – Romance: los dublineses presentan su evolución hacia un sonido más atmosférico.
- Sam Fender – People Watching: rock con tintes sociales y una conexión directa con la juventud británica.
- Martin Carthy – Transform Me Then Into A Fish: a sus 84 años, el veterano del folk se convierte en el nominado de mayor edad en la historia del premio.
- Pa Salieu – Afrikan Alien: rap y afrofusión que reivindican raíces y futuro en la música urbana.
- Jacob Alon – In Limerence: debut folk intimista que apunta a nuevas sensibilidades en la canción británica.
- Emma-Jean Thackray – Weirdo: jazz experimental y grooves futuristas en uno de los discos más arriesgados de la lista.
- PinkPantheress – Fancy That: bedroom pop y electrónica minimalista que definen el pulso de la Generación Z.
- Joe Webb – Hamstrings & Hurricanes: jazz-pop con un aire fresco y poco convencional.
Diversidad y narrativa
Este año el jurado ha apostado por una mezcla intergeneracional: desde leyendas del folk como Carthy hasta artistas que apenas empiezan su carrera discográfica. La presencia de tres irlandeses (CMAT, Fontaines D.C. y Jacob Alon) añade tensión: hasta ahora, ningún artista de Irlanda ha ganado el Mercury Prize.
En cuanto a géneros, la lista equilibra indie, pop alternativo, jazz, rap y folk, aunque críticos señalan la ausencia del metal y de la electrónica más dura. Aun así, la propuesta de FKA twigs y Emma-Jean Thackray asegura representación experimental.
Un premio fuera de Londres
La elección de Newcastle como sede marca un cambio simbólico: el Mercury Prize busca descentralizar la industria musical británica y acercarse a otras escenas culturales. El evento Mercury Fringe extenderá la celebración con conciertos, charlas y exposiciones en toda la región, reforzando la idea de que el premio no es solo una gala, sino un espacio de encuentro cultural.
¿Por qué importa el Mercury Prize?
Más allá del trofeo y las £25,000 para el ganador, el Mercury Prize funciona como plataforma global: artistas emergentes ven disparadas sus reproducciones en streaming y ventas tras ser nominados. Ejemplos pasados como Arctic Monkeys, James Blake o Sampha muestran cómo este reconocimiento puede catapultar carreras.
Relevancia en la escena global
Mientras en América Latina premios como el Gardel o el Grammy Latino celebran la riqueza de sus escenas, el Mercury Prize se ha convertido en un termómetro de la innovación musical en las islas británicas. En un año donde existen géneros dominantes en la conversación global, el Mercury propone otra narrativa: la de los discos que, aunque no encabecen charts internacionales, definen el pulso creativo de una región.
El próximo 16 de octubre se sabrá quién se lleva el título de Álbum del Año. ¿Será el regreso triunfal de Pulp, el salto definitivo de CMAT o la consagración de FKA twigs? Lo único seguro es que esta edición quedará como una de las más diversas y emocionantes en la historia del premio.
Guía rápida de los álbumes nominados
Pulp – More
El regreso más esperado del britpop. Después de dos décadas, Jarvis Cocker y compañía entregan un álbum que mezcla nostalgia con un sonido más maduro. Letras que miran atrás con ironía, pero también con ternura.
Wolf Alice – The Clearing
Indie rock expansivo con tintes shoegaze. Es su cuarta nominación al Mercury y confirma su capacidad de evolucionar sin perder su identidad. El disco se mueve entre la crudeza y la sutileza etérea.
CMAT – Euro-Country
La irlandesa brilla con su mezcla de country-pop, humor ácido y vulnerabilidad. Letras autobiográficas con guiños kitsch y una producción que la posiciona como una de las voces más originales de su generación.
FKA twigs – Eusexua
Oscuro, experimental y profundamente sensual. FKA twigs lleva su fusión de electrónica, R&B y performance un paso más allá, explorando la sexualidad y la identidad en un trabajo tan conceptual como visceral.
Fontaines D.C. – Romance
El grupo de Dublín muestra una evolución hacia un sonido más atmosférico y melódico, alejándose del post-punk crudo de sus inicios. Letras cargadas de simbolismo y un tono más introspectivo.
Sam Fender – People Watching
Un retrato social y emocional del Reino Unido actual. Fender combina guitarras potentes con narrativas sobre juventud, ansiedad y resiliencia. Su estilo lo coloca como el heredero espiritual de Springsteen en la escena británica.
Martin Carthy – Transform Me Then Into A Fish
Leyenda viva del folk británico. A los 84 años, Carthy presenta un disco cargado de tradición oral, arreglos minimalistas y canciones que parecen cuentos ancestrales. Histórico por ser el nominado de mayor edad.
Pa Salieu – Afrikan Alien
Rap y afrofusión en estado puro. El artista británico-gambiano explora la migración, la identidad y la resistencia en un disco que mezcla beats contundentes con raíces africanas. Un retrato sonoro de la diáspora.
Jacob Alon – In Limerence
Debut folk intimista que captura la melancolía de las relaciones modernas. Con influencias de Nick Drake, su álbum es un viaje suave y delicado, donde cada canción funciona como un diario personal.
Emma-Jean Thackray – Weirdo
Jazz futurista, grooves hipnóticos y arreglos impredecibles. Thackray rompe etiquetas con un álbum que dialoga con Sun Ra y Flying Lotus, creando un espacio sonoro psicodélico y profundamente rítmico.
PinkPantheress – Fancy That
Minimalismo electrónico y melodías pegajosas. El bedroom pop de PinkPantheress sigue conquistando a la Gen Z con canciones cortas, directas y llenas de vulnerabilidad. Música hecha para TikTok, pero con un trasfondo emocional.
Joe Webb – Hamstrings & Hurricanes
Jazz-pop ligero, divertido y sin pretensiones. Webb combina improvisación con estructuras pop, logrando un disco fresco que sorprende por su sencillez y encanto.
Claves para el público
- Favoritos críticos: FKA twigs, Wolf Alice, Fontaines D.C.
- El regreso histórico: Pulp.
- La apuesta indie-pop fresca: CMAT y PinkPantheress.
- El guiño a la tradición: Martin Carthy y Jacob Alon.
- El riesgo experimental: Emma-Jean Thackray.