El pasado 13 de noviembre de 2025, durante la 26ª edición de los Latin GRAMMY, Luis Enrique —el “Príncipe de la Salsa”— añadió un nuevo logro a su extensa carrera: “Aguacero”, su colaboración con el ensamble venezolano C4 Trío, ganó el galardón a Mejor Canción de Raíces, una categoría estrenada este año que honra a composiciones que rescatan, reinterpretan o celebran las tradiciones musicales de América Latina.

«Aguacero» —escrita por Luis Enrique junto a los compositores Fernando Osorio y Rodner Padilla— destaca por su fusión de cuerdas tradicionales, arreglos acústicos e intención narrativa: una invitación a una lluvia catártica capaz de sanar heridas personales y colectivas, evocando la tierra, la memoria, la identidad.

Con este galardón, Luis Enrique reafirma no sólo su vigencia artística, sino su capacidad de reinvención constante —y su compromiso con la herencia cultural latinoamericana.

“Aguacero” y “La Foto”: tradición, salsa y contemporaneidad en tensión

Además de su victoria con “Aguacero”, Luis Enrique fue nominado en la categoría Mejor Canción Tropical por “La Foto”, demostrando que su nueva etapa artística no se limita a rescatar raíces, sino que también abarca su salsa poderosa, introspectiva y moderna.

Ese doble reconocimiento —una canción de raíces y otra de salsa contemporánea— revela un artista consciente de su historia y abierto a expandir sus códigos: tan cómodo evocando lo ancestral como reinventando su repertorio con sensibilidad actual.

Con más de 30 años de trayectoria, múltiples premios (Latin GRAMMY, Grammy, Lo Nuestro, Billboard Latinos) y himnos como “Yo No Sé Mañana”, Luis Enrique se ha consolidado como una de las voces fundamentales de la salsa y la música tropical. Su victoria en esta nueva categoría de los Latin GRAMMY marca un giro significativo: no se trata solo de ritmo, sino de identidad, raíces y memoria compartida.

«Aguacero» no es solo una canción: es una declaración. Porque reconocer las raíces no es nostalgia: es resistencia cultural, es memoria colectiva, es futuro.

Qué representa este premio para la música latina

• Reconocimiento oficial a lo tradicional: La creación de la categoría “Mejor Canción de Raíces” evidencia un nuevo interés institucional por valorar la herencia musical de Latinoamérica. Que “Aguacero” sea el primer ganador marca un precedente.
• Puente entre generaciones: Luis Enrique simboliza una continuidad —una voz con historia— que dialoga con nuevas sensibilidades, mostrando que la tradición puede evolucionar sin perder su esencia.
• Visibilidad global para lo latino clásico: En un entorno dominado por el urbano y la fusión, este premio reivindica géneros como la salsa, la tradición y lo orgánico, recordando su valor en el relato musical latinoamericano.
• Apuesta por la diversidad sonora: La simultaneidad de éxitos con “La Foto” y “Aguacero” muestra que lo latino no es monolítico. Las raíces, la salsa, la modernidad conviven y enriquecen el panorama.

Con este Latin GRAMMY, Luis Enrique no solo celebra un logro más en su carrera: inaugura un capítulo donde sus raíces suenan más vigentes que nunca. “Aguacero” es su carta de presentación —una invitación a escuchar con historia, con cuerpo, con alma.

Y para quienes siguen su camino, queda claro: la salsa, la memoria, la tradición, pueden y deben seguir reinventándose. Luis Enrique lo demuestra con elegancia, convicción y corazón.